CIUDAD DE MÉXICO, MX.- La falta de control y supervisión de las empresas rellenadoras de agua purificada está causando un problema de salud pública, publicó VanguardiaMX.
Francisco Bustamante Ruisanchez, presidente de la Asociación Civil Agua en México, alertó que siete de cada 10 litros que surten estas empresas “presentan algún tipo de contaminación, principalmente con bacterias coliformes provenientes de materia fecal”.
Según estudios de la Asociación Mexicana para la correcta Hidratación, el 70% de los recipientes y garrafones en los las llamadas purificadoras venden agua potable, contienen bacterias que provocan enfermedades gastrointestinales.
“El 70% de los envases de estos negocios rellenadoras presentan algún tipo de bacteria y el 50%, presenta Ecoli, es decir que todo lo que se vende, o al menos siete de cada 10 garrafones por parte de estos negocios están contaminados con algún tipo de bacteria”
Negocio riesgoso para la salud
El costo por instalar una purificadora (o rellenadora de envases) oscila entre los 50 mil y los 100 mil pesos y se ha vuelto un modelo irregular de emprendimiento en todo México que, por sus precios, atrae a una gran cantidad de clientes sin importar los riesgos sanitarios.
Para Bustamante Ruisanchez, las rellenadoras de envases “lucran con la salud” de los mexicanos, y aseguró que las consecuencias por consumir agua de mala calidad ya se están viviendo, pues aseguró que las enfermedades gastrointestinales son el tercer padecimiento más común, con cerca de 2.5 millones de casos anuales.
Aunado a esto, el presidente de la Asociación Mexicana para la correcta Hidratación señaló que, en la mayoría de los casos, el agua que venden las purificadoras, además de estar contaminada, no contienen los minerales necesarios para hidratarse de manera saludable, es decir que se cae en la paradoja de beber agua que no hidrata en tiempo de sequía y ondas de calor.
Bustamante Ruisanchez dijo que según un análisis de la Red Nacional de Medición de Calidad de Agua (Renameca), más de 70% de pozos y ríos disponibles en México tienen contaminación con plomo, mercurio y otros metales pesados por arriba del límite establecido para consumo humano, lo cual podría tener consecuencias severas cuando ingresan al cuerpo por ingesta directa o por alimentos contaminados.
Además, el crecimiento poblacional no ha ido de la mano con una constante mejora en la infraestructura hídrica, por lo que las filtraciones y fugas son constantes a escala nacional, y eso provoca que el agua llegue contaminada hasta nuestro grifo, destacó. Por ello, millones de familias recurren a otras formas para satisfacer sus necesidades de consumo de agua potable segura. Por desgracia, añadió, “ahí es donde los negocios dedicados a rellenar los envases de agua ponen en riesgo la salud de estos mexicanos”. (Fuente: VanguardiaMX)