CHETUMAL, MX.- Los operativos de vigilancia realizados por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en la comunidad fronteriza de Subteniente López fueron calificados como una “payasada” por la población debido a que solamente tratan de justificar su salario cuando conocen donde se ubican los “sitios” donde se realiza el tráfico de drogas, mercancías, combustible e indocumentados”.
Sin embargo a pesar del despliegue policial coordinada por el secretario de Seguridad Pública, Salvador Rocha Vargas, el resultado fue nulo porque no se logró detener a ninguna persona dedicada a alguna actividad ilícita; esta acción, lejos de proporcionar confianza entre los habitantes de Subteniente López generó malestar, debido a que, según algunos pobladores de lugar, las autoridades saben donde se “refugian” los delincuentes.
Tal y como lo señalan habitantes de la comunidad fronteriza, en Subteniente López convergen elementos de seguridad de los tres niveles de gobierno: Policía Municipal, Estatal, Fronteriza, de la Procuraduría de Justicia del estado (PJE), Armada de México, Ejercito, elementos de la Aduana y Fiscales, resultando la localidad el estado con mayor número de corporaciones en un solo sitio, curiosamente es considerada una zona de alta incidencia delictiva.
Por lo anterior, personas que habitan en esa localidad y que omitieron sus nombres por temor a represalias, señalaron que toda la movilización policial efectuada por la FEPA es mera “payasada”, debido a que saben perfectamente los sitios donde se realizan ilícitos y quienes comandan la venta de drogas al menudeo, mercancía ilegal, licor proveniente de la zona libre, así como la venta de combustible y el tráfico de personas provenientes de centro América.
“La FEPA solamente estuvo dando vueltas por el poblado asustando a la gente pero los verdaderos delincuentes solo se reían de ellos, porque mucho antes de que las unidades llegaran a la localidad, los maleantes ya sabían, esto indica el grado de corrupción que hay al interior de las policías”, denunció uno de los habitantes del lugar.
Varios de los vecinos de la localidad coincidieron en señalar que desde hace dos meses el número de robos a casa habitación ha incrementado en un 50 por ciento y las autoridades no hacen nada por evitarlo, situación que ha causado molestia entre los habitantes que no descartan tomarla justicia “por su propia mano” ante la pasividad de las autoridades. (Fuente: El Periódico)
