Se cumple un año de la caída de Gregorio Sánchez en Cancún

0
18

CANCÚN, MX.- Se cumple un año el próximo miércoles 25 de mayo de la captura del entonces candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia, a la gubernatura de Quintana Roo, Gregorio Sánchez Martínez y no se vislumbra un panorama prometedor, pues pesan delitos muy graves en su contra.


Transcurría el 8 de mayo del 2010, cuando el entonces candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia, a la gubernatura de Quintana Roo, Gregorio Sánchez, arrancaba oficialmente su campaña y ese día, acompañado por su esposa Niurka Sáliva y de los dirigentes estatales de estos partidos, reconocía que en días pasados había acudido a la PGR en la ciudad de México.
Sin embargo, aclaró que ese encuentro no fue para declarar, sino por iniciativa propia y para hablar sobre el combate a la delincuencia, cosa que por supuesto estaba muy alejada de la realidad y es que semanas antes, el entonces alcalde con licencia, se vio envuelto en el escándalo de las casas de espionaje desmanteladas en Cancún por el Ejército Mexicano, por la presunción de que empleados de su gobierno y colaboradores suyos estaban involucrados en su operación.
El martes 25 de mayo de ese año, cuando regresaba de la ciudad de México, luego de una reunión con líderes nacionales del PRD y Convergencia, los rumores de su detención eran muy grandes, cuando alrededor de las 10 y media de la noche, el entonces gobernador del estado Félix González Canto, quien regresaba de Toluca, estado de México, se enteró de los hechos.
Elementos de la Policía Federal Ministerial de la Procuraduría General de la República, detuvieron a Gregorio Sánchez en el Aeropuerto de Cancún; pero no fue sino pasadas las 11 y media de la noche que lo trasladaron a la Terminal FBO y se lo llevaron fuertemente custodiado en una de la PGR al penal de Nayarit.
De inmediato, González Canto garantizó la gobernabilidad en Benito Juárez y giró instrucciones al entonces Secretario de Gobierno Eduardo Ovando Martínez, para que se coordinara con la encargada del Despacho de Benito Juárez, Latifa Muza Simón
Dos días después, Gregorio Sánchez Martínez quedaba formalmente preso en el penal de “El Rincón” en Nayarit junto con su gente de confianza, Boris del Valle Alonso, ex asesor en materia de seguridad pública, -quien meses después quedaría libre por falta de elementos-; Francisco Velasco Delgado, ex secretario de Seguridad Pública Municipal, Alejandro Betancourt, ex director de la policía turística y Marco Antonio Mejía López, ex director de la cárcel, a quienes exactamente un año antes, el juez primero de Distrito en el estado de Nayarit les dictó auto de formal prisión, junto con Octavio Almanza Morales, “El Gori 4″, presunto autor intelectual y material del asesinato del general Mauro Enrique Tello Quiñónez, en febrero del 2009.
Ese mismo juez ordenó la aprehensión de Gregorio Sánchez Martínez por los delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita, lavado de dinero y delitos contra la salud y con ello se terminaba su sueño de contender por la gubernatura de Quintana Roo.
De hecho el vocero de la PGR Ricardo Nájera reconoció en su momento, que uno de los que lo vinculó con la delincuencia organizada, fue Daniel Alberto Vargas Larrainza (a) “El Fercho”, quien fue detenido en febrero del 2010 en Cancún y de acuerdo con la Sedena, fungía como sicario del cártel del golfo y se encargaba de desaparecer los cuerpos de las personas que eran ejecutadas, además de coordinar los secuestros y extorsiones que realizaban en Cancún.
En los días siguientes se sabría que la SIEDO recibió el reporte de la Unidad de Inteligencia Financiera, de que Gregorio Sánchez Martínez había realizado operaciones sospechosas por un monto aproximado a los 27 millones de pesos desde el 2002 y hasta el 2008, utilizando 7 cuentas bancarias.
El propio vocero de la PGR dijo que la averiguación en contra de Sánchez Martínez se inició el 15 de enero de ese año, derivada de una denuncia anónima, pero también de los reportes de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, que detectó diferencias entre los ingresos declarados y los percibidos por Sánchez Martínez.
Además recordó que el 3 de mayo del 2010 el propio Gregorio Sánchez fue notificado de las acusaciones en su contra y compareció a declarar dentro de la averiguación previa, donde negó los cargos y aseguró que presentaría su declaración por escrito, cosa que según estas autoridades, nunca hizo y por ello vino la orden de aprehensión de parte del juez federal.
De acuerdo al expediente, en estas cuentas bancarias Gregorio Sánchez realizó como empresario del ramo inmobiliario, depósitos por casi 30 millones de pesos, pero los únicos recursos que las autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público encontraron justificados como parte de sus ingresos fueron 2.3 millones, el resto, era en opinión de las autoridades hacendarias y fiscales de la SIEDO, producto de actividades ilícitas.
Estas diferencias entre depósitos e ingresos de Sánchez Martínez, así como las declaraciones de testigos protegidos y otros miembros de la delincuencia organizada, demuestran, según la PGR, los vínculos de Gregorio Sánchez con Los Zetas y los hermanos Beltrán Leyva, pero además que el origen del dinero también, provenía del tráfico de indocumentados.
Pero si eso fuera poco, hay que recordar que en el 2008, el empresario Steve Santander lo acusó de pedirle 10 millones de dólares y no pagarlos.
Entonces, un juez federal le obligó a pagar 2 millones de dólares, luego de que se comprobó que solicitó dicha cantidad para financiar su campaña a la alcaldía de Cancún. (Fuente: Enfoque Radio)

Comentarios en Facebook