TULUM, MX.- En las comunidades cercanas donde está anunciada la construcción del Aeropuerto de la Riviera Maya se acentúan las invasiones de predios y despojos de terrenos ejidales, en los que están coludidas autoridades, jueces, notarios e incluso policías, los intereses en conflicto han impuesto su propia ley como sucedió en su oportunidad en el núcleo agrario Manuel Antonio Ay.
Con una lista de varios conflictos ejidales presuntamente sin resolverse, un grupo de 36 comuneros del ejido Manuel Antonio Ay, representados por su presidente del Comisariado Ejidal, Luciano Canché Cupul, denuncian a través de una carta firmada que todavía persiste el rezago agrario, invasión de predios y violaciones a diversas leyes.
Y es que en este núcleo agrario donde hay controversias por cuestiones de linderos, aprovechamientos forestales, invasión de predios y presunta burocracia en la resolución en el planteamiento de problemas a las autoridades del sector agrario, Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y otras dependencias.
Luciano Canché Cupul explicó que en el ejido Manuel Antonio Ay, desde hace dos años persiste un problema interno que ha implicado violaciones a la Ley Agraria, y hasta la fecha trámites burocráticos han agudizado el conflicto con personas ajenas sobre unas tres mil hectáreas.
El conflicto entre dos grupos de campesinos del ejido Manuel Antonio Ay, por la posesión de tres mil hectáreas, sigue siendo un foco rojo dentro de los problemas agrarios e internos, aseguró Canché Cupul.
Al ser entrevistado la mañana de ayer, pidió al Gobierno del Estado garantizar la seguridad de los campesinos, e intervengan autoridades del ramo agrario para poner fin a la controversia que lleva dos años pendiente y en la que están en juego tres hectáreas, por el incumplimiento de parte de una empresa inmobiliaria que representa Rodrigo Cortés Mena.
Entre los campesinos hay temor de que pueda ocurrir un enfrentamiento, pues señaló que dos regidores locales “han protegido” a un grupo armado proveniente de Yucatán, que pretenden invadir las tres mil hectáreas, destinadas por la asamblea general de ejidatarios como área de uso común, es decir, es de todos. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)