Mantienen “blindado” a Tulum

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TULUM, MX.- La tradicional tranquilidad de Tulum se perdió la noche del miércoles luego de una serie de extraños incidentes que incluyeron cuatro balaceras en diferentes zonas del poblado.

Mantienen hermetismo sobre la balacera

TULUM, MX.-Total hermetismo guardan las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en el caso en el que se vieron involucrados agentes judiciales, quienes dispararon en repetidas ocasiones contra un vehículo compacto que se encontraba en las instalaciones de la Policía Municipal, que segundos antes había arribado al sitio con dos mujeres a bordo, las cuales eran el objetivo de una persecución que generó por diversas avenidas y colonias del municipio.
De igual manera, a unos cuantos metros de las instalaciones policíacas, ubicadas en la carretera Tulum-Boca Paila, bajaron de una camioneta a un hombre a quien se llevaron con rumbo desconocido, mientras que las dos mujeres, a pesar de que una tuvo una herida en la espalda, quedaron a disposición del Juzgado Cívico y posteriormente, obtuvieron su libertad.
En franco desafío hacia las autoridades policíacas municipales, los agentes judiciales ingresaron sin permiso alguno a sus inmediaciones y abrieron fuego contra el panorámico del vehículo, cuyas ocupantes pretendían salvar sus vidas; además, dejaron 15 impactos de bala en diferentes paredes del edificio, aunque, según las autoridades, sólo hallaron tres de 2.23.
Los hechos se suscitaron alrededor de las 21:30 horas del miércoles, cuando el vehículo Ford Fiesta, color blanco, sin placas, con permiso provisional del Estado de Yucatán, circulaba de la zona de playas hasta Tulum; sin embargo, al llegar a unos cuantos metros de las inmediaciones de la Policía Municipal, los agentes judiciales que ya los seguían iniciaron los disparos a la unidad, por lo que procedieron a acelerar la marcha para protegerse.
Al llegar a las inmediaciones de la corporación policiaca, decidieron internarse al patio para salvar sus vidas, pero los judiciales, que vestían de civil, encañonaron a los vigilantes y los obligaron a permitirles el paso para tratar de detener a las dos damas.
Cuando vieron el auto compacto estacionado, los agentes policíacos activaron nuevamente sus armas atinándole cuatro disparos al parabrisas, mientras que otras balas se incrustaron en las paredes de las instalaciones del Juzgado Cívico y de la Dirección de Seguridad Pública.
Después, ingresaron a las instalaciones del Juzgado Cívico, en donde ordenaron a jueces y custodios a tirarse al piso, procedieron a revisar el interior del inmueble, dejando a las dos mujeres -una herida y otra con crisis nerviosa- en el juzgado y se llevaron al hombre que minutos antes habían detenido y se lo llevaron con lujo de violencia con rumbo desconocido, aunque posteriormente se confirmó que terminó en las celdas preventivas de la Policía Judicial.
Tras tener conocimiento de los hechos, el director general de Seguridad Pública, Transito, Bomberos y Policía Turística, Juan Carlos Santana Rovelo, y sus directores que estaban llevando a cabo recorridos en la ciudad, se trasladaron al lugar, pero ya estos judiciales, que se ignora en qué vehículo se desplazaban, se habían retirado del lugar.
Ante estos hechos, solicitaron la intervención de las autoridades ministeriales que arribaron al lugar, y procedieron a las inspecciones de la unidad. Por otro lado, de igual forma arribaron personal de la Marina-Armada, Ejército Mexicano, Policía Federal Preventiva y Policía Estatal, quienes resguardaron las instalaciones policiacas ante la posibilidad de un nuevo enfrentamiento.
Las personas que viajaban en el vehículo compacto, con permiso de circulación del Estado de Yucatán, responden a los nombres de Nilvia Beatriz Catzín Abán, la cual presentó lesiones en la espalda por el vidrio del panorámico, y Elodia Catzín Abán, hijas del ejidatario Vitaliano Catzín Tun, mismas que luego de que las declararan fueron liberadas y ahora ellas son las agraviadas. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

Las autoridades locales mantienen hermetismo en torno a lo que pasó y sólo se limitaron a informar que un presunto “levantón” perpetrado en dentro de las mismas instalaciones de la policía municipal se trató, “en realidad”, del cumplimiento de una orden de aprehensión por parte de agentes de la Procuraduría de Justicia.
Sin embargo, como consecuencia de esos hechos, hubo cambios en la estructura del cuerpo de agentes judiciales asignado a Tulum que, además, se incrementó en número.

Entre dudas

El gobernador Roberto Borge Angulo dijo que los judiciales detuvieron a cuatro personas, pero que se investiga si éstos están involucrados con la delincuencia organizada o con algún conflicto de tierras.
Por lo pronto, en Tulum hay una vigilancia mayor e, incluso, elementos de la Armada establecieron una vigilancia especial en las instalaciones de Seguridad Pública, donde también hay policías estatales.
El secretario de Seguridad Pública, Bibiano Villa Castillo y el procurador Gaspar Armando garcía Torres estuvieron casi todo el día en Tulum, pero no proporcionaron información alguna a los medios.
La noche del miércoles, como consecuencia de las cuatro balaceras y la persecución que acabó en las instalaciones de Seguridad Pública, la población vivió momentos de zozobra.
Incluso, hubo quienes se protegieron en el interior de una iglesia, que fue cerrada, a pesar de que en su interior se desarrollaba una ceremonia.
Ayer la alcaldesa Edith Mendoza envío un mensaje a la población, tratando de tranquilizarla y aseguró que en Tulum es el municipio del estado más seguro y donde funcionan mejor las estrategias de seguridad.
Aseguró que, a pesar de los hechos del miércoles, Tulum sigue siendo “muy seguro”. (Fuente: Diario de Yucatán)

Exigen empresarios aclarar acontecimientos

PLAYA DEL CARMEN, MX.- Por los violentos hechos ocurridos la noche del miércoles en la ciudad de Tulum, protagonizado presuntamente por agentes de la Policía Judicial del Estado (PJE) asignados a la plaza de Cancún al perseguir a balazos a los ocupantes de un automóvil, y que en un principio se pensó el incidente estaba relacionado con el Crimen Organizado; el sector empresarial levantó la voz, exigió el total esclarecimiento de lo suscitado, y se deslinden de responsabilidades.
Alrededor de las 21:30 horas del miércoles, se originó el caos en Tulum y en este municipio, porque agentes de la PJE, persiguieron a los cuatro ocupantes de un automóvil en la cabecera del noveno municipio, y no obstante ingresaron al estacionamiento de la Policía Municipal y después en las instalaciones de la misma, ubicado en la carretera estatal que conduce del Bulevar Tulum a la zona hotelera, les realizaron varios disparos con armas AR-15, calibre 2.23, haciendo impacto en el vehículo y la fachada del edificio, e inclusive se metieron al inmueble.
Por la falta de información de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) que explique lo ocurrido en Tulum, porque hasta se presume que los agentes de la PJE pretendían ejecutar a los ocupantes del auto compacto color blanco; empresarios de esta ciudad, exigieron al primer abogado de Quintana Roo, Gaspar Armando García Torres que se esclarezca los hechos, y de ser necesario que se sancione a quienes resulten responsables del tiroteo que desencadenó en el caos en la cabecera del noveno municipio.
Los entrevistados, quienes pidieron que se omitan sus nombres por cuestiones de seguridad personal, por la desconfianza que hay hacia las autoridades de la PGJE, aseveraron que debería intervenir el gobernador del estado, Roberto Borge Angulo, porque de resultar cierto que los que protagonizaron la balacera son agentes de la PJE la situación sería más grave aún, porque su función es velar por la seguridad de la ciudadanía y no de atentar en su contra.
Los empresarios, se dijeron preocupados de los violentos hechos de Tulum, y por consiguiente deben ser esclarecido y sancionado a los responsables; porque se podría repetir estas acciones gansteriles, como ha venido ocurrido con los agentes de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública, a cargo del general Carlos Bibiano Villa Castillo, quienes se han distinguido más por sus actos de prepotencia que por sus resultados en la prevención del delito. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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