CANCÚN, MX.- El ex candidato a gobernador de Quintana Roo, Gregorio Sánchez Martínez, afirmó que regresó al estado lleno de paz y amor, y no a ‘tomar revancha o cobrar venganza’, pero también rechazó que haya dejado problemas financieros en el Ayuntamiento de Cancún y sorprendió a todos cuando dijo que Roberto Borge y Félix González Canto son sus amigos.
Tras tomar agua para recuperar la voz quebrada por la emoción, en rueda de prensa, ‘Greg’ Sánchez dijo que no puede responsabilizar a nadie de su estancia en prisión por 14 meses y arraigo por 40 días.
Aseguró que los testigos protegidos que lo señalaron como responsable de diversos delitos son ‘mitómanos’, no es posible saber quién está detrás de ellos o a quienes obedecen.
Ante los señalamientos de que ‘estaría metida la mano’ del ex gobernador Félix González Canto, el ex alcalde de Benito Juárez respondió: ‘yo nunca lo he dicho, se han especulado demasiadas cosas y solamente es especulación’.
Antes, había afirmado que tanto González Canto como el actual gobernador, Roberto Borge Angulo, eran sus amigos y lo habían apoyado a él y a su familia cuando permaneció preso.
Incluso, legitimó el triunfo de Borge Angulo, pues subrayó que ganó en una elección democrática, en la que él fue dejado fuera tras su detención el 25 de mayo de 2010.
En cuanto a su relación con el presidente municipal, Julián Ricalde Magaña, dijo que fue uno de sus funcionarios de su círculo más cercano y la relación entre ambos es de ‘primer nivel’.
Flanqueado por Alejandro Pascal, uno de sus 15 abogados defensores, y el pastor evangélico, Arturo Farela, aseguró no haber cometido los ilícitos por los cuales fue inculpado con ‘mentira y saña’.
Agradeció a los jueces, a la Judicatura y a la procuradora general de la República, Marisela Morales, por atender sus peticiones de revisar sus expedientes, así como a los cientos de personas que le enviaron de 20 a 30 cartas diarias de solidaridad.
‘Gracias a todos esos profesionales hoy estoy libre y exonerado de todos esos cargos que falsamente, que ilegalmente hicieron en contra de mi persona’, reiteró el ex funcionario municipal.
Resaltó que quedó libre porque imperó la justicia divina por encima de la terrenal.
Anunció que así como está preparando un disco con 15 alabanzas de las 125 que escribió durante su estadía en el penal de máxima seguridad de Nayarit, retomará su actividad empresarial de 30 años para recuperarse financieramente, pues está muy endeudado, casi en quiebra.
Agradeció la ofertas de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) , del Trabajo (PT) y Convergencia que le proponen ser su candidato a senador, pero aseveró que por el momento no le interesa la política, que no está dentro de su prioridades.
Argumentó que no tiene una bola de cristal para predecir lo que pasará, pero por el momento se descarta.
Respecto al tráfico de cubanos y presuntamente los contrató en el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) , Sánchez Martínez argumentó que efectivamente contrató isleños, pero todos son nacionalizados.
Del endeudamiento por más de 700 millones de pesos que dejó en su segundo año como alcalde, detalló que se utilizó para participar en la recuperación de playas y otra parte para la pavimentación de calles en cinco regiones, pero no sabe qué se hizo al final con ellos.
Por su parte, el abogado defensor de Sánchez Martínez, Alejandro Pascal, anticipó que hoy pondrá la demanda penal ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) por la alteración de la declaración patrimonial de su cliente.
Al final de la rueda de prensa, precisó que la denuncia será por la violación al falsificar documentos.
Aunque dijo no tener en la memoria el monto de la fortuna personal de su cliente, estimó que sería entre 20 y 30 millones de pesos, lo que Gregorio Sánchez reconoció en su declaración patrimonial ante la Contraloría municipal. (Con información de Notimex)