PLAYA DEL CARMEN, MX.- Tras el último balance efectuado en las playas recuperadas se han perdido al menos 110 mil metros cúbicos de arena en los 4.2 kilómetros recuperados y entregados en febrero de 2010, es decir de 25 a 30 metros de ancho, aunque de manera afortunada está dentro del medio submarino que pueden rescatarse con el uso de la ingeniería integral, manifestó el director de la Zona Federal Marítimo y Terrestre (Zofemat) en Solidaridad, Jorge Rolando Pastrana Pastrana.
Recordó que desde la recepción del tramo el 8 de febrero de 2010 la dirección de la Zofemat inició el monitoreo para saber el comportamiento de la morfología de qué ocurre, el proceso de erosión por transporte de litoral, dado a que no se le puede llamar perdida si se considera que los finos están dentro del mar por situaciones naturales, que al igual que los escarpes visibles también se tiene en el agua.
Reconoció que son factores para este problema las estructuras rígidas como el muelle fiscal, el de Ultramar y el espigón del Porto Real que no fue retirado en la totalidad, así como aquellas semirígidas, es decir los geotextiles o enmallados con arena, que tenían colocados todos los hoteleros enfrente de sus inmuebles, pensando de que harían una protección natural y evitar la pérdida de arenales.
Insistió que el transporte de los finos se erosionan, pero los volúmenes están acomodándose, haciendo bancos de arena en algunos sitios y dejan unas playas con más capacidad de carga y actividad recreativa, aunque hay otras secciones en el medio sumergido, según refleja la batimetría, medición que efectúan cuando menos tres veces a la semana desde Xcaret hasta Punta Esmeralda.
Ejemplificó: “en 50 a 40 metros en el mar ya tengo el agua a dos metros y en algunas zonas recorro de cien a ciento veinte y el agua apenas está a sesenta centímetros, estas compensaciones de lo que migra de la parte terrestre hacia el medio submarino evidentemente se tiene a lo largo de todo el comportamiento del proyecto”.
Reconoció del mismo modo que esa migración de arena ha sido precisamente por la falta de una estrategia de control, como la solución de ingeniería, de que el proyecto señala en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que deberá hacerse una recarga a los dos años, y no esperar a que se pierdan esos volúmenes y que tienen un costo de dólares por metro cúbico.
Sin embargo, se tiene que estabilizar y propiciar que la arena quede lo más permanente, “dado el comportamiento actual, si hemos tenido algunas afectaciones importantes, tan es así, que se preveía un ancho entre 30 y 50 metros, aunque la CFE tenía como rango los 30 metros, pero ocurre a tenerse a desplazamientos menores a 30 metros, como a la altura del hotel Viva Maya un pico muy fuerte donde da la pauta que no tiene una estructura geológica, roca o pasto marino que permitan reducir la energía cinética de la penetración del agua o cuando entre y haga un remanso genere el menor movimiento de erosión de arenas”, enfatizó.
Sostuvo que se habla ya de 110 mil metros cúbicos, es decir de 25 a 30 metros de ancho perdidos, de ahí que deba tenerse una solución integral, porque al no tener defensas naturales el agua entra, al desplazarse los volúmenes de arena, se compensa con agua con embalajes muy fuertes precisamente por la formación escarpes que se denotan dentro del medio sumergido, esa sinuosidad que no se ve tiene reflejo en la zona federal.
Destacó el funcionario municipal que en el caso de Playacar las afectaciones no han sido tan severas como las del centro, donde se perciben los escarpes importantes, pero en análisis fotográfico del comportamiento perciben que ahora es invierno con los pleamares máximos, iniciando a fines de otoño, invierno y primavera, pero los bajamares (en verano) el mar se desplaza hacia adentro y nos deja grandes extensiones de arena.
Los comportamientos obedecen a ciclos, pero hay zonas donde se ha acentuado más estos volúmenes de arena, como el caso de la calle 10, 12, 14 y 16, con escarpes que oscilan entre el metro y 1.80 metros, aunque lo propicio es dejarlo a lo natural, debe pensarse en ingeniería integral, que no nada más sean soluciones momentáneas.
Finalmente, Pastrana Pastrana acentuó que como autoridades deben trabajar en un mismo sector; por otro lado, ver el problema como el punto más estratégico para lo que es el desarrollo y aprovechamiento del turismo, no traer material de bancos con el afán de tener grandes extensiones de playa sino soluciones permanentes, involucrar a la sociedad, al sector hotelero que están en esta misma concordancia porque al final de cuentas es lo que se tiene en promoción. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
