CANCÚN, MX.- Con lentitud y sin ningún avance en las investigaciones de las ejecuciones registradas en el mes de noviembre, permanece la Policía Judicial del Estado (PJE), que adjudica el pausado proceso a la serie de cambios que se han registrado al interior del área de homicidios en la dependencia estatal.
La cifra de muertes violentas continúa en aumento y hasta la fecha, no existen detenidos por estos hechos.
Tan sólo en el mes de noviembre fueron cinco las ejecuciones que se registraron en distintos puntos de la ciudad, las cuales fueron perpetradas con extrema violencia y en puntos céntricos de la ciudad.
Las autoridades estatales aseveraron que continúan las investigaciones correspondientes, sin embargo, lo cierto es que no existe algún avance significativo en estas pesquisas.
Tal es el caso de la ejecución de Alex Iván Ciau Dzib, encontrado calcinado y severamente golpeado, el pasado primero de noviembre, en un área verde de la Región 252, fraccionamiento Vista Real.
Su taxi, tipo Tsuru, con placas de circulación 8705-TPB y con número económico 6628, fue localizado en la Supermanzana 216, manzana 20, calle 12 de Diciembre, cerca de la calle Malvinas, en el fraccionamiento Isla II, frente al cervefrío “La Ginata”.
A pesar que todo en un principio apuntaba a un crimen pasional, las autoridades aseveraron que podría tratarse de un ajuste de cuentas por parte del crimen organizado, ya que antes de ser calcinado, el taxista fue brutalmente golpeado hasta que perdió la vida.
El segundo de los casos se registró el pasado dos de noviembre, cuando al interior de su domicilio ubicado en la Región 510, manzana 4, lote 10, Angel Eduardo Ruiz Palomo, de 15 años de edad, recibió un disparo en la frente el cual le arrebató la vida en cuestión de segundos.
Ante esta ejecución, familiares y amigos del ahora occiso decidieron encubrir a los atacantes, por lo que a pesar de que los agresores siguen prófugos, se dio a conocer que el joven, además de delincuentes, se trataba de un reconocido narcomenudista de la zona.
En el domicilio del ahora occiso fueron encontradas 10 dosis de marihuana, las cuales eran propiedad del joven, mismo que era reconocido en la zona por sus actividades delictivas.
Tan sólo unos días después, exactamente el día 6 de noviembre, autoridades de las diferentes dependencias de seguridad encontraron el cuerpo embolsado de Marvin Rubén Sánchez, quien fue asfixiado hasta morir y abandonado en un área verde de la Región 216, manzana 16, calle Prolongación Cozumel.
Maniatado y cubierto del rostro con cinta industrial, el cuerpo del ahora occiso yacía a lado de una cartulina con el texto “Esto te pasó x meterte con mi vieja”; sin embargo, la forma de ejecución indicaba características de un ajuste de cuentas por parte del crimen organizado.
Asimismo, fue el 13 de noviembre cuando las autoridades recibieron un llamado para verificar el reporte de una persona sin vida al interior de un domicilio de la Región 95, manzana 25, lote 26, sobre la calle 8, hogar de Hipólito Itzá Canché, de 56 años de edad.
Ante su llegada, las autoridades encontraron a Itzá Canché sin vida en medio de la sala, el cual tan sólo vestía ropa interior que dejaba ver una lesión en el pecho originada por arma de fuego calibre .9 milímetros, misma que le arrebató la vida lentamente, además de que se encontraba maniatado y amordazado con un calcetín.
Hipólito Itzá Canché corrió con la misma suerte que uno de sus hijos y un sobrino, quienes también fueron ejecutados en octubre del año pasado. El mismo había salvado la vida meses antes, cuando un comando armado irrumpió en su domicilio en la Región 95 y le dispararon hiriéndolo con un arma corta en los glúteos. El ataque dejó en claro un evidente ajuste de cuentas por parte del crimen organizado, pero hasta el momento no existen detenidos.
La última ejecución se registró justo nueve días antes de terminar el mes, el pasado 21 de noviembre, cuando el cuerpo de Jorge Iván Asencio Pérez, de 27 años de edad, “Sureño” ejecutado con el tiro de gracia y encontrado maniatado la madrugada de ese día en la Región 208.
Este homicidio ocasionó gran confusión e incertidumbre entre las dependencias de seguridad, puesto que a un lado del cuerpo fue encontrado un narcomensaje dirigido a tres elementos de la Policía Judicial del Estado (PJE), entre los que se encontraban el capitán de la corporación, Arturo Olivares Mendiola, y el comandante de la Zona Hotelera, César Durán (a) “Chilango”.
El cartel tenía la leyenda: “Chilango Duran aquí está el que te pagaba nómina y tu “Gato”, te comiste el pastel solo o le diste a Mendiola saludos a tus hijas ya bájale de huevos Atte: Romeo”.
En cuanto a este caso, la mañana de miércoles trascendió que seis sujetos miembros de “Los Pelones” fueron detenidos por su presunta responsabilidad por la ejecución de Asencio Pérez, los cuales ya se encuentran bajo investigación y bajo custodia de los elementos de la Policía Judicial.
Esta situación puso en jaque a las autoridades de la Policía Judicial, puesto que si tan sólo cinco ejecuciones no pudieron ser esclarecidas en un mes, las registradas en meses anteriores continúan siendo un misterio y forman parte de la lista de expedientes que engrosan los archivos de casos sin resolver. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
No avanzan investigaciones sobre ejecutados en Cancún
Comentarios en Facebook