CANCÚN, MX.- Quintanarroenses se llevan prácticamente todo el lote en bienes muebles e inmuebles, subastados por la federación en Cancún, tras haber sido abandonados, embargados por deudas con el fisco o incautados a la delincuencia organizada.
El Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), organismo que depende de la SHCP, puso a disposición del público en general un lote de 117 bienes muebles por un valor inicial de 15 millones de pesos, el cual alcanzó la cifra de 30 millones de pesos con el 95 por ciento de las unidades vendidas. Por otra parte, fueron vendidos 65 bienes inmuebles por 172.8 millones de pesos.
El bien mueble de mayor valor fue una aeronave turbo commander modelo 690D, SERIE 15009, matrícula XC-AA39, con un precio de salida de 222 mil pesos, se vendió en tres millones de pesos.
Javier Dorantes Plascencia, director corporativo de Comercialización y Mercadotecnia del SAE, dijo que se espera que será el mejor año del SAE con estas subastas a sus 12 años de existencia.
El funcionario calcula que cerrarán el año con una venta arriba de los cuatro mil mdp, incluida la operación especial de la venta de ingenios azucareros que eran del Gobierno, que fueron cerca de tres mil 800 mdp y habrá mil mdp adicionales.
Serán 50 subastas las realizadas este año. En Cancún tuvieron lugar hoy dos subastas, una de todo tipo de mercancías como son vehículos y aeronaves de ala móvil y a la fija que propiciaron una pujante batalla de ofertas presenciales y vía Internet.
El SAE también subastó 600 bienes inmuebles, entre ellos algunos incautados al crimen organizado, como es una lujosa propiedad en el municipio de Zapopan, Jalisco, todo ello mediante procedimiento diferente al de oferta y martillo, este fue de sobrecerrado donde se elige la oferta más alta.
Así vendió el SAE 450 inmuebles, entre ellos 75 de la Península de Yucatán, con una base de salida de 600 mdp, donde la mayoría de las propiedades proviene de la Tesorería de la Federación.
“También se subastaron algunos lotes en Isla Mujeres, en Cancún y en Chetumal, como son inmuebles habitaciones y comerciales”, citó Dorantes Plascencia.
Señaló que la mayor parte de los bienes muebles deriva del SAT, de la parte de Aduanas, donde fueron abandonados o se embargaron; en segunda instancia la Tesorería de la Federación, porque algunas personas pagan con bienes sus impuestos y no con dinero o se los embargan; el tercer grupo es muy amplio, de quienes cambian sus flotillas de vehículos, de financieras que tienen muebles adjudicados de gente que no les pagó, más algo de la PGR que es como el uno por ciento. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
