Acude Peña Nieto a la asamblea del PRI y les arenga a cerrar filas y encarar la elección del 2018

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Más de 10 mil priistas recibieron con aplausos a Enrique Peña Nieto que, exultante, levantaba los brazos saludando a los suyos reunidos en la XXII Asamblea Nacional Ordinaria, en el Palacio de los Deportes.

Los gritos de “¡PRI, PRI, PRI!” retumbaron por varios minutos en el domo de cobre, como preámbulo de la campaña por la presidencia que quieren retener a como dé lugar.

Al clausurar la asamblea, a la que asistieron todos los miembros del gabinete, los gobernadores priistas, los expresidentes del partido; legisladores y representantes de las organizaciones y sectores, Peña Nieto hizo un llamado a la unidad y a cerrar filas en el PRI para encarar la elección del 2018. 

Recordó el triunfo de hace seis años y pidió a los priistas actuar como “soldados de la patria” para ganar “una batalla decisiva”.

Entre aplausos y gritos, Peña criticó a los populistas y a quienes quieren retroceder.

Pidió al PRI llevar con orgullo los colores de la bandera, “seguro de que México gana, cuando gana el PRI”, coreando a los asistentes que gritaban “Por México, siempre por México”. 

“Nosotros asumimos con valor y visión un mejor futuro. Otros apuestan al caudillismo la sumisión de sus aliados y la división del país. Otros por falta de experiencia y el fracaso de sus gobiernos disimulan con incongruencias; otros abandonaron sus ideales negociando sus posiciones”, dijo el presidente Peña al sostener que el PRI es un partido valiente que afronta los retos.

Al mencionar los casos de corrupción e impunidad, señaló que quienes han traicionado al partido deberán afrontar las consecuencias de sus actos.

Respecto a los cambios a los estatutos realizados en la asamblea y que abren la puerta a candidatos externos, señaló que fortalecen al partido porque lo acercan a la ciudadanía para que militantes y simpatizantes puedan participar ante el reto electoral.       

Sostuvo que el PRI se presentará en el 2018 después de haber reformado al país, lo cual le da la calidad moral para ir a la elección.

Ante las críticas de los adversarios, el mandatario aseguró que en la próxima elección el PRI defenderá lo que ha construido por el futuro de México.

En su largo discurso, el residente en Los Pinos dijo que los priistas siempre defenderán los principios de la revolución y, por eso, el PRI seguirá siendo vigente.

“Regresamos para reformar”, sentenció Peña destacando las reformas estructurales que impulsó.

“Hemos realizado los cambios más profundos del país en muchas décadas”, soltó, entre aplausos, reconociendo el papel de las fuerzas armadas en sus labores de seguridad pública.

Aseguró que la economía crece de manera sostenida, con la recuperación de salario del 12 por ciento y la creación de 3 millones de empleos.

Y ante Estados Unidos, indicó, han actuado con claridad. 

Freno a “pluris” y apertura a candidaturas

El Palacio de los Deportes lucía lleno, con gente vestida de rojo, y decenas de pancartas aludiendo a la “nueva revolución” como lema del priismo.

Al llegar a la clausura de la asamblea, Peña Nieto parecía candidato, saludando a la gente, tomándose fotos mientras se quitaba el saco para abrazar y saludar a sus seguidores hasta llegar al escenario poniéndose la chamarra roja e invitando a Enrique Ochoa Reza a saludar, juntos, a los delegados.

“¡Peña, Peña, Peña!”, retumbó el grito dentro de la cúpula geométrica del domo de cobre, a donde llegaron miles de priistas.

Al tomar la palabra, el presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, dijo que después de 107 días de trabajo la asamblea alcanzó acuerdos importantes para convencer a la gente y mantenerse en el poder ganando la elección del 2018.

Manifestó que se equivocaron los detractores de que habría rompimientos en la asamblea, al tiempo que aplaudió a Alfredo del Mazo y Miguel Riquelme, asegurando que con unidad el PRI es invencible.

Anunció que el tricolor ganará la Presidencia de la República y todas las gubernaturas en el 2018. 

“La revolución de hoy es pacífica” manifestó Ochoa Reza, quien citó que hubo más de 3 mil mesas de debate con la participación de más de 390 mil militantes.

Al resumir los acuerdos, destacó la creación de la comisión de ética y la de anticorrupción; la obligación de presentar la declaración de impuestos y de bienes, “para que ningún militante más le falle a la sociedad y a su partido”.

Citó también los acuerdos, entre ellos el 50 por ciento de las candidaturas para mujeres; la protección de los derechos humanos al establecer mecanismos contra cualquier discriminación; acordar coaliciones electorales y gobiernos de coalición, “para que el presidente priista en 2018 garantice la gobernabilidad democrática”.

En los estatutos, resaltó que el PRI “rompió los candados”,  para que cualquier militante que quiera ser candidato tenga que hacer campaña, que no haya más brincos de plurinominales y  que uno de cada tres candidatos sea para los jóvenes.

“Somos un partido que rompe la cerraduras, vamos a detener el populismo autoritario, vamos a frenar la amenaza del populismo autoritario, lo hicimos en 2107 y lo haremos en 2108. ¡Vamos a ganar!”, exclamó mientras los priistas coreaban de pie.

En el arranque de la asamblea, Claudia Ruiz Massieu, secretaria general del PRI, puso a disposición de los dictámenes de las cinco mesas, manifestando que nadie como el partido puede encabezar los cambios que requiere el país.

“Para gobernar un país, primero hay que ser plural, incluyente y abrirse a la ciudadanía. Ninguna fuerza política ha hecho el ejercicio democrático de escuchar tantas voces. En esta asamblea hubo un partido de consensos, no fue de militantes mudos, sino propositiva y critica”, dijo la exsecretaria de Turismo.

Aseguró que el PRI está dispuesto a aprender de sus errores y a explorar nuevas ideas, a romper sus propios paradigmas. 

“Somos un partido audazmente revolucionario”, lanzó.

Precisó que construir, reconstruir y mantener la confianza ciudadana fueron las metas de la asamblea.

“Saldremos más fuertes y competitivos para garantizar la confianza ciudadana y mantener el gobierno”, ‘sentenció Ruiz Massieu.

Por su parte, Manlio Fabio Beltrones destacó las reformas encabezadas por Enrique Peña Nieto, como parte del proyecto que el PRI encabeza para impulsar al país.

Dijo que en la mesa de visón de futuro se debatió el proyecto económico de un gobierno sustentado en ofrecer igualdad de oportunidades, con instituciones públicas fuertes, que garantice el Estado de derecho y evite abusos de los poderes público y privado.       

Jorge Carlos Ramírez Marín, presidente de la mesa de estatutos, destacó que por unanimidad se aprobó que no haya legisladores “chapulines” y la supresión de años de militancia para un candidato, así como un 30 por ciento de candidaturas para jóvenes.

Reconoció que la crisis de los partidos no es exclusiva del PRI, pero afirmó que solo el priismo es capaz de realizar la nueva revolución. (Fuente: Proceso)

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