TUMBAS SUBACUÁTICAS DE TULUM: Cenotes son la última morada de 120 osamentas de los primeros americanos en el área maya

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TULUM, MX, MX.- Además de las importantes osamentas de la “Mujer de Naharon”, del “Joven de Chan Hol”, de la “Mujer de las Palmas” y el extraviado “Hombre del Templo”, en total son más 120 los esqueletos, de entre ocho y 13 mil años de antigüedad que han sido descubiertos al interior de los cenotes, principalmente en Tulum, a lo largo de 17 años, todos ellos relacionados con investigaciones de arqueología subacuática.

Lo anterior lo informó la arqueóloga del Instituto Nacional de Antropología e Historia en Quintana Roo (INAH) Carmen Rojas Sandoval, quien aseguró que estos hallazgos son importantes, al dar a conocer el origen de los posibles primeros habitantes de América.

Con anterioridad Carmen Rojas Sandoval había informado que el cenote “Las Calaveras” ubicado en Tulum podría ser el depósito funerario de la época prehispánica mejor conservado y el de mayor concentración de esqueletos humanos del área maya.

La entrevistada refirió que este depósito natural de agua fue detectado en 2002, cuando la presencia de restos óseos fue reportada por un buzo y desde el 2007 el INAH lleva a cabo el registro sistemático de las osamentas del cenote, labor en la que se cuenta con la participación de National Geographic.

En este cenote de 30 metros de diámetro se han encontrado dichos restos humanos en un perfecto estado de conservación, lo que permitirá el desarrollo de estudios de genética y antropológicos para conocer más a fondo a la antigua población maya que se asentó en esta región, comentó Rojas Sandoval.

“Se han contabilizado 120 esqueletos cuya antigüedad oscila entre los años 125 – 236 de nuestra era, previo incluso al cenote Chichén Itzá, en Yucatán, y que hasta antes de este hallazgo representaba el de mayor número de osamentas depositadas en este tipo de espacios inundados que los antiguos mayas usaron como depósitos funerarios”, explicó.

Ante tales hallazgos existe la hipótesis que para los antiguos mayas, los cenotes, al igual que las cuevas, representaban entradas al mundo de los muertos, llamado Xibalbá, por lo que eran usadas como cámaras funerarias naturales. (Noticaribe)

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