Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- Federico Ranero, director general de UBER México, consideró un retroceso los acuerdos alcanzados con la aprobación y publicación de la Ley de Movilidad desde la propuesta del ejecutivo al considerar al servicio que se presta como empresa de transporte público y operar bajo un modelo de concesión en el Estado.
Al efectuar una manifestación a la puerta del poder legislativo, Ranero pidió al Gobernador Carlos Joaquín González frenar las reformas a la Ley de Movilidad y no ceder a la presión de grupos de poder que tienen “secuestrado” el servicio de transporte de pasajeros en la entidad.</p
Anticipó que el servicio UBER permanecerá suspendido de ser aprobadas dichas reformas aunque permanecerán abiertos al diálogo con la autoridad gubernamental en búsqueda de un trato incluyente y de respeto al derecho de las personas de elegir el servicio de transporte que desee.
“Las acciones legales son la última opción porque preferimos anteponer el dialogo”, reiteró.
El director general de UBER México reiteró su preocupación de que las reformas a la Ley de Movilidad -que son discutidas en la comisión de transporte y serán sometidas a discusión y aprobación este martes- califiquen a UBER como empresa de transporte público, la cual debería operar bajo un esquema de concesión aun cuando la Comisión Federal de Competencia Económica y la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de mayo de 2017 establezca que el servicio que se presta a través de radiocomunicaciones no es un transporte público.
Las reformas que ha propuesto el Ejecutivo a la Ley de Movilidad son una barrera a la innovación para el desarrollo aunado a la amenaza a las ganancias de 5,000 familias y a la opción de movilidad de más de 130,000 personas que utilizaron el servicio durante los 15 meses que operaron en la entidad , subrayó.
Recordó que Uber comenzó operaciones en Cancún en septiembre de 2016 con el propósito de facilitar nuevas oportunidades de autoempleo y emprendimiento, nuevas opciones de transporte, y nuevas y eficientes soluciones a los problemas de movilidad de la ciudad y después de 15 meses de operación, decidieron suspender las operaciones con el propósito de trabajar mano a mano con las autoridades con miras a una regulación incluyente para empresas como Uber, usualmente referidas como Empresas de Redes de Transporte (ERT).
Pasaron más de 150 días después de nuestra suspensión antes de que se publicara una nueva Ley de Movilidad que contemplara a las ERT . Con ella, el Gobierno de Quintana Roo dio un paso hacia adelante pues no sólo contempla a las ERT, sino que atinadamente reconoce a dichas empresas y a quienes ofrecen su servicio a través de ellas (es decir, a los socios conductores) como una nueva opción de movilidad, diferente al transporte público, afirmó.
Sin embargo consideró que la presión ejercida por ciertos grupos de poder pareciera pesar más que la voz y solicitud de la propia ciudadanía por tener una opción de movilidad segura, eficiente y accesible, pues el Gobierno está por dar marcha atrás a lo ya avanzado.
Reiteró que la discusión de reformas a la Ley de Movilidad representan un retroceso en materia regulatoria, así como una a amenaza a las posibilidades de ganancias y de autoempleo para más de cinco mil familias en Quintana Roo al limitar drásticamente la operación de Empresas de Redes de Transporte en el estado.
Federico Ranero explicó que la Comisión Federal de Competencia Económica emitió una serie de comentarios relevantes a estas reformas, particularmente sobre 2 puntos relacionados a que las ERT no deben considerarse como un servicio público de transporte y que no se debería sujetar a los socios de las ERT a trámites adicionales tales como concesiones por vehículo y conductor que podrían representar un retraso en la creación de oferta y que podrían inhibir la innovación.
Dijo que el gobierno del Estado y los legisladores deben preguntar al turismo qué tipo de sericios de transporte requiere y a los quintanarroenses que quieren una opción de autoempleo y emprendimiento para brindar ganancias a sus familias “ganancias que en muchas ocasiones son complementarias a otras fuentes de ingreso en tanto que más del 80% de los socios conductores se conectan a la aplicación de Uber menos de 40 horas a la semana”.
Son las voces de ciudadanos que piden una solución a sus necesidades de movilidad. Una solución eficiente sin importar el clima o la demanda, una opción accesible independientemente de las posibilidades de pago en tanto que alrededor del 50% de los adultos en Quintana Roo no cuenta con una tarjeta bancaria o simplemente prefiere pagar en efectivo.
Pero, ante todo, son las voces de todos aquellos que piden una opción de movilidad segura sin importar la hora o la ubicación, enfatizó.
Afirmó que miles de turistas, nacionales y extranjeros saben que Quintana Roo -el principal destino turístico del país-, merece las mejores opciones de movilidad. 200 mil de ellos han abierto la aplicación de Uber desde que suspendimos operación en diciembre del 2017. Quintana Roo es un estado que recibe más de 16 millones de visitantes al año, cuya industria turística representa más de 80% de los empleos de ciudades como Cancún y conlleva una derrama económica de más de 8 mil millones de dólares anuales, debe tener soluciones innovadoras para sus visitantes y habitantes, detalló.
Federico Ranero reiteró la petición al Gobernador Carlos Joaquín González de escuchar la voz de sus ciudadanos: “Queremos ser socios de Quintana Roo a largo plazo, apoyar el crecimiento del estado y contribuir a afianzarlo como el destino de vanguardia que es. Por favor, Sr. Gobernador, no demos marcha atrás. Avancemos juntos por Quintana Roo y llevemos al estado a la vanguardia internacional, manifestó”. (Noticaribe)