Por Saraí Santillán
PLAYA DEL CARMEN, MX.- Carlos Enrique Guerra Sánchez, sexto regidor del municipio de Solidaridad, acusó al ex contralor municipal Ludwin Paul Cárdenas Lugo y a otros ex funcionarios más, de inventarle un desfalco de dos millones 300 mil pesos cuando fungía como oficial del Registro Civil, en el trienio 2013-2016.
De acuerdo con el regidor, aunque actualmente le fueron retirados los cargos, supuestamente porque carecieron de pruebas, se derivaron luego que interpuso una demanda laboral al Ayuntamiento, cuando estaba al frente Cristina Torres Gómez, porque en la administración antepasada, que encabezó Mauricio Góngora, no le pagaron un bono económico por realizar bodas fuera del recinto oficial del Registro Civil.
Aunque los cargos por desfalco en su contra ya fueron retirados, la demanda laboral contra el Ayuntamiento continúa abierta, factor que, explicó Carlos Guerra, fue suficiente para abstenerse de votar en la segunda sesión ordinaria cuando se designó a Omar Sánchez Cutis y cuatro ciudadanos más, como los encargados para llevar pleitos y cobranzas, actos de administración en materia laboral del Ayuntamiento de Solidaridad.
“Cuando fui oficial número dos y director del Registro Civil, según la Ley de Hacienda cuando hiciera actos de matrimonios fuera de la oficina, me tendrían que dar el 20% de mi sueldo (…) pasó el tiempo, se pasaron los tres años y nunca recibí ese bono en mi sueldo (…) cuando asumió Cristina Torres, en octubre (2016) intenté hacerlo, pero no obtuve ninguna respuesta, no me dieron nada, no me contestaron, entonces el 13 de enero (2017) presenté una demanda en la Junta Especial Burocrática del municipio de Solidaridad” explicó Guerra Sánchez.
El funcionario resaltó que renunció cuando concluyó la administración mauricista, por lo que la demanda es sólo por la situación del bono, cantidad monetaria que hasta la fecha le debe el Ayuntamiento, cantidad que se reservó dar a conocer.
Sin embargo, abundó, derivado de esta situación, le fabricaron un desfalco al mismo tiempo, según él, para que desistiera de la demanda. En la acusación hubo, dijo, hasta firmas falsas por medio de un dictamen de auditoria.
En este caso, acusó al auditor José Carlos Vargas Jiménez y a Ludwin Paul Cárdenas Lugo, ex contralor de la administración pasada. El pasado 26 de septiembre Carlos Guerra fue absuelto de la acusación de desfalco.
“Ludwin Paul Cárdenas Lugo, el ex contralor 2016-2018, también está Rufino Tzab, él era el director de Normatividad y Contraloría y Gestión de la Contraloría Municipal y definitivamente José Carlos Vargas Jiménez (…) esas personas a mi juicio son un peligro que anden como funcionarios, pues andan suelto y en lugar de castigarlos los premian”, agregó. (Noticaribe)