CIUDAD DE MÉXICO, MX- El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, deslindó ayer la consulta popular para decidir sobre la ubicación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) de cualquier incertidumbre en el mercado financiero y de la caída del peso frente al dólar ocurrida el miércoles, publicó La Jornada.
Está descartado un problema económico, independientemente de la decisión que tomen los ciudadanos. Voten sin miedo, resaltó.
Después de acudir a la mesa de recepción ubicada en el centro de Tlalpan, donde depositó su voto en blanco, por responsabilidad con el proceso, según indicó su vocero Jesús Ramírez, López Obrador defendió la consulta y sostuvo que su movimiento no ha hecho nunca un fraude electoral ni recurrirá a mapaches.
“Eso tiene que ver con la mafia del poder, con el PRIAN. Eso es del pasado. Es vulnerable la ratería. La gente está en favor de la democracia, no del fraude. La consulta tiene toda la seguridad”, declaró.
Consideró preferible la decisión de miles, de millones, que la decisión de un solo hombre. La democracia es lo mejor, es el camino a seguir, la democracia participativa. No hay que tener miedo, agregó.
Atribuyó a la empresa Televisa la intención de “crear un ambiente de miedo, de incertidumbre. No me puedo quedar callado porque es realmente nefasto, antidemocrático. Eso no tiene que ver con el interés general, que le vaya bien al país. ¿Saben cuál es el problema de fondo?, que hay medios de comunicación que también se dedican al contratismo”.
“Es muy irresponsable cómo maneja la información. Uno de sus periodistas, de manera muy irresponsable, como pregonero, dice que hay incertidumbre, que habrá devaluación. Lamento que esto se dé. Entiendo que hay intereses económicos de por medio, pero hay que poner por delante el interés del pueblo”.
Afirmó que si como resultado de la consulta la decisión es ampliar la Base Aérea Militar de Santa Lucía, los contratos vigentes en Texcoco no están en riesgo. No se cancelarán ni se cometerá ninguna injusticia, manifestó.
Incluso dijo que buscará a los empresarios Carlos Slim, Hipólito Gerard –cuñado de Carlos Salinas de Gortari– y Olegario Vázquez Raña, así como a los representantes de Ingenieros Civiles Asociados (ICA) para serenarlos.
“Son cinco grandes empresas, incluso algunos me lo han mandado a decir: que no hay ningún problema, que serán respetuosos de lo que decidan los ciudadanos”, reveló López Obrador. (Fuente: La Jornada)