‘Ganancias’ de venta o rifa del avión presidencial servirán apenas para cubrir deuda con Banobras

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CIUDAD DE MÉXICO, MX.- Una vez que el gobierno federal logre deshacerse del avión presidencial (mediante rifa, venta o renta) los recursos recolectados tendrán que destinarse a pagar el crédito vigente con Banobras, por lo que no se registrarán ganancias ni ahorros sustantivos en la operación que empuja el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, publicó aristeguinoticias.com.

Originalmente, la aeronave costó 218 millones de dólares (alrededor de 2 mil 963 millones de pesos al tipo de cambio en 2012).

Sedena y Hacienda pagaron a Banobras mil 833 millones de pesos desde la compra hasta la decisión de vender el avión.

Aún falta pagar 2 mil 724 millones de pesos como parte de la renta acordada hasta 2027, según dijo Jorge Mendoza Sánchez, director general de Banobras, en la conferencia mañanera del pasado 14 de enero.

En esa conferencia, el funcionario reconoció que la operación de compra serviría para que el gobierno federal pague la deuda que tiene con Banobras: “si llegamos a vender la aeronave al precio de avalúo, es suficiente para pagar el saldo que tiene el gobierno federal con Banobras”.

Lo mismo lo reconoció el presidente López Obrador en la conferencia del 23 de julio de 2019: “Entonces, sí van a quedar recursos, el hecho de no tener que estar pagando esos créditos es un ahorro”.

La aeronave vale 150 millones de dólares, según el avalúo realizado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es decir, 2 mil 820 millones de pesos al tipo de cambio actual.

Por este motivo, si algún comprador acepta pagar el precio mínimo, se tendría una ganancia por 96 millones de pesos.

Por otro lado, si se realiza la rifa se recaudarían 3 mil millones de pesos (6 millones de boletos, a 500 pesos cada uno), lo que daría una ganancia de 276 millones de pesos, aunque todavía se tendría que descontar comisiones y gastos con la Lotería Nacional, según reconoció el propio Presidente.

México compró la aeronave en 2012 por órdenes del entonces presidente Felipe Calderón mediante el esquema de arrendamiento financiero: Banobras adquirió al contado el avión en Estados Unidos y lo puso en renta para el Ejército mexicano.

Con este esquema, Sedena “se obliga al pago de una renta durante un plazo forzoso, la cual deberá cubrir cuando menos el valor del bien, los costos financieros, los impuestos causados en la operación y, en su caso, los accesorios financiados”, según la ficha técnica del servicio que ofrece Banobras.

La operación de Felipe Calderón permitió conseguir la aeronave mediante un esquema de renta que no se traduce en deuda pública formal.

Así lo describe una evaluación interna de Banobras de 2012: “El gobierno federal (…) solicitó a Banobras financiamiento, en la modalidad de Arrendamiento Financiero a un plazo de 20 años, para la adquisición de una Aeronave Boeing 787-8, su equipamiento, dos helicópteros y dos aviones Lear jet. El monto del Arrendamiento Financiero es por USD 302.52 millones, más el monto que resulte de la cobertura de tipo de cambio”.

Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador planteó la posibilidad de vender el avión presidencial a cambio de equipo médico que en conjunto tenga un valor de 2 mil 499 millones de pesos.

Según su propuesta, estarían dispuestos a recibir equipo para resonancia magnética, angiógrafos, tomógrafos, aceleradores lineales, ambulancias, , entre otros.

También prometió recursos del avión para mejorar el sistema hidráulico en Zacualtipán, Hidalgo: “De visita en el hospital rural de Zacualtipán, en Hidalgo, el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió con los habitantes de ese municipio a destinar parte de los recursos obtenidos de la venta del avión presidencial a garantizar que el servicio de agua en esta región”, dice un comunicado del 17 de septiembre de 2019.

El 12 de junio del año pasado, sostuvo que los recursos para financiar la política migratoria: Entonces, para contestar: “¿de dónde va a salir el dinero? Pues saldría de lo que vamos a recibir por la venta del lujoso avión presidencial, de nombre, como burla, José María Morelos y Pavón, el apóstol de la igualdad, el que buscaba que se moderara la indigencia y la opulencia. Así se llamaba el avión presidencial”. (Fuente: aristeguinoticias.com)

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