ESTADOS UNIDOS.- El presidente Donald Trump prometió este sábado que su administración terminará con lo que él llamó “violencia mafiosa” desatada en ciudades de Estados Unidos tras la muerte de un hombre afroamericano desarmado a manos de la policía de Minnesota, publicó El Financiero.
Además, culpó a los grupos de izquierda por enfrentamientos con la policía y daños a la propiedad en todo el país.
“Las turbas están devastando el trabajo de toda la vida de las personas buenas y destruyendo sus sueños”, dijo en Cabo Cañaveral, Florida, en declaraciones después del primer lanzamiento de astronautas estadounidenses en órbita desde suelo estadounidense desde 2011.
“No habrá anarquía. La civilización debe ser apreciada, defendida y protegida. Las voces de los ciudadanos respetuosos de la ley deben ser escuchadas y escuchadas en voz muy alta”, remarcó.
El día se vio ensombrecido por manifestaciones en Minneapolis, Louisville, Atlanta, Washington, D.C. y otras ciudades, continuando la lucha política y la división racial que han acompañado a la presidencia de Trump. Los manifestantes exigieron justicia para George Floyd, quien murió esta semana después de que un oficial de policía de Minneapolis se arrodilló en su cuello durante más de ocho minutos durante un arresto por un presunto billete falsificado de 20 dólares.
El oficial, Derek Chauvin y quien es blanco, fue arrestado y acusado de asesinato y homicidio involuntario.
“Los delincuentes de la izquierda radical, matones y otros, en todo nuestro país y en todo el mundo, no podrán incendiar comunidades. No dejaremos que suceda”, reiteró.
Trump no especificó cómo actuaría su administración contra los manifestantes violentos.
“El liderazgo de la Guardia Nacional y el Departamento de Justicia ahora están en estrecha comunicación con los funcionarios estatales y municipales en Minnesota”, explicó, “y estamos coordinando nuestros esfuerzos con las fuerzas del orden locales en todo el país”.
Incluso cuando Trump estaba en Florida, manifestantes se reunieron nuevamente afuera de la Casa Blanca y se enfrentaron con el Servicio Secreto el viernes, lo que provocó seis arrestos y lesiones “múltiples” entre el personal de la agencia.
Más temprano este sábado, el presidente alentó a sus seguidores a manifestarse también afuera de su residencia, invitando a una confrontación potencialmente peligrosa.
En su camino a Florida, Trump amenazó con desatar el “poder ilimitado” del Ejército sobre los manifestantes, ignorando las barreras legales para desplegar dicha fuerza dentro de las fronteras de la nación con fines policiales. También ha criticado repetidamente al alcalde demócrata de Minneapolis, Jacob Frey, expresando su indignación porque los manifestantes en la ciudad pudieron ingresar y quemar una estación de policía.
“Los que ponen excusas o justificaciones para la violencia no están ayudando a los oprimidos, sino que están generando nuevas angustias y dolor”, agregó. (Fuente: El Financiero)