TULUM, MX.- El cierre por tiempo indefinido de la zona arqueológica afectará, nuevamente, en los ingresos de los trabajadores del lugar, como los guías de turistas.
“Evidentemente hay una afectación económica directa a los que trabajamos acá como guías de turistas”, lamentó Alejandro Torres.
Sin embargo, añadió que esta situación también repercute de forma negativa en las personas que dependen indirectamente de la actividad en el citado sitio, como taxistas, vendedores de artesanías, operadoras y agencias de viaje.
En ese sentido, el entrevistado exhortó a mantener las medidas sanitarias para avanzar en el plan de reactivación económica.
“El virus sigue y llegó para quedarse entre nosotros, así que esto es un recordatorio que debemos extremar precauciones”, manifestó.
El acceso a la zona arqueológica fue suspendido desde ayer por un brote de COVID-19 entre personal de la taquilla.
Los representantes informaron que en consecuencia se realizarán acciones de sanitización y se aplicarán pruebas PCR al resto de los trabajadores. (Agencia SIM)