Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- A marchas forzadas y en medio de una crisis de personal a consecuencia de un brote de COVID-19 en varias direcciones, el ayuntamiento de Othón P. Blanco inició las reuniones de trabajo con las autoridades municipales electas para la ceremonia de toma de protesta, prevista para los primeros minutos del 30 de septiembre.
Alejandro Rivera Romero, secretario general del ayuntamiento, rechazó dar a conocer el grado de afectación por contagios para no contradecirse con otros directores “pero tenemos pocas manos, pocos elementos, a consecuencia del covid”.
Desde hace 30 días, la Contraloría municipal intensificó el llamado a los directores y la Secretaría General para avanzar en la integración del Sentre, aunque el trabajo de llenado de formatos y escaneo de documentos se ha visto afectado por la falta de trabajadores.
Rivera Romero consideró que sólo cuentan con un 60 por ciento del total de personal para avanzar en el proceso de entrega recepción “pero en estos momentos, a diez días del cambio de estafeta, podemos decir que llevamos un 90 por ciento de avance”.
Sin embargo, reconoció que hay áreas pendientes como la Dirección de Servicios Públicos Municipales.
El secretario general del ayuntamiento dijo que uno de los asientos pendientes que heredarán a la próxima administracion municipal es una demanda laboral interpuesta por el sindicato de trabajadores municipales.
Recordó que el presidente municipal, Otoniel Segovia ya tuvo reunión con Yensunni Martínez para agilizar el proceso de entrega-recepción.
“Estamos trabajando a marchas forzadas porque también es la organización de la toma de protesta que se realizará los primeros minutos del 30 de septiembre a sugerencia del gobierno del Estado para que pueda asistir el gobernador Carlos Joaquín González”, dijo.
El gobierno del Estado propuso el lugar y la hora como parte del protocolo oficial. (Noticaribe)
