CANCÚN, MX.- De manera informal, en el palco que tiene el Gobernador en el estadio “Beto Avila” de Cancún, en el juego entre los Tigres de Quintana Roo y los Rojos del Águila, la noche del jueves se realizó el primer encuentro entre el actual Alcalde de Benito Juárez, Julián Ricalde Magaña, y el Alcalde electo, Paul Carrillo de Caceres.
En el encuentro, en el que por supuesto estuvo Roberto Borge, el perredista Julián Ricalde habría intercambiado con el priista Paul Carrillo los primeros comentarios después del pasado proceso electoral del 7 de julio en el que el PRI recuperó Cancún al ganar las 10 Alcaldías en disputa y 14 de las 15 diputaciones de mayoría.
Aunque hasta casi la medianoche de este jueves no había ningún comunicado oficial del encuentro, ni del Ayuntamiento de Benito Juárez, ni del Gobierno de Quintana Roo, se da por sentado que el encuentro entre estos tres personajes no fue sólo para disfutar el juego de la Liga Mexicana de Beisbol sino, ante todo, tuvo un carácter inminentemente político: el de iniciar la transición hacia el nuevo Gobierno príista en Cancún.
La presencia del Alcalde Julián Ricalde en el palco VIP de Roberto Borge –ya que su remodelación le costó al erario estatal 3 millones de pesos– no se extendió durante todo el juego, ya que apenas en la tercera entrada se despidió de Borge y Paul Carrillo y se fue.
Poco después, en la cuarta entrada, Paul Carrillo, quien apenas ayer declaró que no iniciaría una “cacería de brujas” contra integrantes del gobierno perredista de Julián Ricalde, también abandonó el estadio. (Noticaribe)
