MÉRIDA, MX.- Expansión en actividad agrícola y pecuaria, así como asentamientos humanos, son las principales causas de que en la península se pierden al año cerca de 80 mil hectáreas de zonas forestales; de las cuales, en Yucatán, resultan afectadas aproximadamente 25 mil; según informó el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Eduardo Batllori Sampedro.
El día de ayer se firmó un acuerdo previo que avalará medidas posteriores en materia de atención al ambiente, por parte de 50 empresas con la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma); lo que sucederá el próximo 10 de diciembre de este año, durante la 13 ª reunión de la Conferencia de las Partes (COP13), que se lleva a cabo del 2 al 17 de diciembre, en la ciudad de Cancún, los gobiernos de Yucatán, Quintana Roo y Campeche firmarán el Acuerdo de Sustentabilidad de la Península de Yucatán (ASPY).
La Declaratoria forma parte de un acuerdo territorial para la sustentabilidad, que reúne a diferentes sectores y actores bajo una visión compartida y metas comunes de productividad, rentabilidad y conservación. Mediante acciones coordinadas entre el sector público y privado es posible convertir a la península de Yucatán en una región líder y un ejemplo de crecimiento sostenible, que fomente las economías locales y logre la articulación con mercados nacionales y globales. Este esfuerzo está siendo impulsado por la Comisión regional de cambio climático de la Península de Yucatán, con el apoyo de la ONG internacional The Nature Conservancy y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO).
Como antecedente, durante el año 2010, los mismos tres gobiernos peninsulares pactaron un acuerdo de colaboración en la COP16, entre sociedad civil y gobierno. Las metas de dicho tratado se han cumplido.
Entre las empresas que firmaron la mañana de ayer en la Universidad Marista se encuentran: Cuauhtémoc Moctezuma (Heineken México), Universidad Interamericana para el Desarrollo –UNID Vista alegre, Los Trompos, Tere Cazola, Bepensa, Grupo Bimbo, Cotemar, Kekén, CCE de Campeche y Grupo Modelo México.
Las metas contempladas por el ASPY son: deforestación en un cero por ciento; que se restauren 2 millones de hectáreas; que el 50 por ciento del territorio de la península sea manejado de manera sustentable y que se realice la conservación dinámica de paisajes bioculturales en 5 millones de hectáreas; además de consecución de financiamiento para la economía verde, así como la restauración del 20 por ciento de los arrecifes y 30 por ciento de la duna costera, como medida de resiliencia ante el cambio climático.
Debido a la gran extensión de áreas protegidas con que cuenta la península de Yucatán bajo esquemas de unidad de manejo ambiental, decretadas como área natural protegidas; incluyendo extensiones arrecifales y ecosistemas de playa-dunas, la realización de este tipo de acuerdos resulta indispensable y trascendente para las políticas de conservación. (Fuente: La Jornada Maya)