Advierten daño de corales y muerte de extensas zonas arrecifales por recale masivo de sargazo

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Por Rafael Briceño

CHETUMAL, MX.- La descomposición del sargazo a lo largo de la Costa Maya ha ocasionado la pérdida de zonas de playa, pero también la muerte de hectáreas de arrecifes, corales blandos y duros, reconoció el investigador titular del Colegio de la Frontera Sur, Héctor Hernández Arana

Manifestó que las acciones implementadas en la zona costera de Mahahual no han sido con una estrategia definida ni tampoco con una supervisión por parte de las autoridades, ya que sólo se ha hecho desde una perspectiva de beneficio económico y sin considerar el impacto ambiental que ha ocasionado el sargazo a los ecosistemas.

Recordó que desde que comenzaron a analizar la llegada del sargazo a las costas quintanarroenses en el 2015, se han observado cambios importantes en el ecosistema con el daño a los ecosistemas y la pérdida de zonas de playa, “y aunque no se ha profundizado en las investigaciones los efectos del oleaje y los fuertes vientos ocasionan que el sargazo depositado en la línea de playa sea devuelto al mar arrastrando porciones de arena”.

Aunque consideró que uno de los efectos más graves es el cambio en el ecosistema del sistema arrecifal, ya que la descomposición del sargazo ha ocasionado la muerte de corales blandos -como los “abanicos de mar”- y duros que ahora son zonas muertas, “pues hay hectáreas de arrecifes que se han perdido por efecto de la contaminación que ocasiona el sargazo”.

Hernández Arana explicó que las observaciones realizadas desde el año pasado es que la materia orgánica, consecuencia de la descomposición del sargazo se deposita en la zona arrecifal, “pues la planta se encuentra a lo largo de la costa y no sólo donde llega la gente a nadar. A lo largo de la zona costera de Mahahual se han dado cambios en la línea de playas”.

Reconoció que los habitantes de Mahahual tratan de mitigar el impacto del sargazo pero las acciones no han sido claras y con una supervisión por parte de las autoridades y se han colocado pequeños espigones de roca, “pero sin una estrategia, supervisión y  orientación técnica y es contraproducente ya que si bien puede ocasionar el depósito de arena puede aumentar la erosión en otras partes

Consideró que los estudios de evaluación del impacto ambiental podría tardarse entre 5 y 10 años. (Noticaribe)

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