Por Itzel Chan
MÉRIDA, MX.- En Suma de Hidalgo, municipio de Yucatán, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) desmanteló una pelea de gallos que se llevó a cabo en medio de la contingencia sanitaria por coronavirus (Covid-19), violando las recomendaciones emitidas por el Gobierno del Estado para mantener el aislamiento social y evitar contagios.
De acuerdo con información de la SSP, fueron ocho personas detenidas a causa de la organización de este evento en el que también participaron demás pobladores de la localidad.
Otro de los motivos de las detenciones es que dentro del evento se vendían bebidas alcohólicas, a pesar de que actualmente está vigente la Ley Seca en el estado, también como una medida para salvaguardar la seguridad e integridad de las familias en medio de esta cuarentena.
Al evento se calcula que acudieron poco más de 50 personas y no fue posible detenerlos a todos, pues huyeron en cuanto inició el operativo policíaco.
Es preciso mencionar que mientras en Quintana Roo ya entró en vigor la ley que prohíbe las peleas de gallos, el uso de caballos para jalar calesas y las corridas de toros, en Yucatán aún son legales este tipo de eventos y son incluidos en fiestas patronales de los municipios.
Mientras se desarrollan no hay sanción alguna para las personas, sin embargo, el Código Penal de Yucatán, decreta que por cometer maltrato animal, la penalidad va de tres meses a un año de prisión y de 50 a 100 días multa, cuando se cometan actos de crueldad que no pongan en peligro la vida de éste, pero si los actos ponen en peligro la vida, le provoquen una incapacidad parcial o total permanente, la pena señalada se incrementará hasta en una mitad y si esa crueldad o maltrato le causa la muerte, la pena será de seis meses hasta dos años de prisión y de 200 a 400 días de multa.
Este mismo Código señala que en el caso de que se haga uso de métodos que provoquen un grave sufrimiento al animal previo a su muerte las penas aumentarán en una mitad aproximadamente. (Noticaribe)