Por Rafael Briceño
CHETUMAL, MX.- Ante el número de casos positivos y fallecimientos pero sobre todo por el aumento considerable de contagiados asintomáticos que se registra en Othón P. Blanco, el sistema hospitalario se encuentra al borde del colapso, según manifestaron representantes de la Secretaría de Salud en la reunión del comité municipal.
Hicieron énfasis en que el comportamiento ciudadano con su relajamiento en el cumplimiento de las medidas sanitarias como el uso del cubrebocas, la sana distancia pero sobre todo el generar aglomeraciones en espacios públicos coloca a Chetumal y al municipio en un punto del no retorno en el colapso de los servicios médicos.
La regidora María Hadad Castillo dio a conocer el contenido de la sesión del Comité de Salud municipal y su insistencia, desde semanas anteriores, en la necesidad que la autoridad municipal se ponga las pilas y realice acciones para reducir la movilidad de la población en espacios públicos ante el aumento de casos positivos y fallecimientos por COVID-19 que hasta el reporte del 29 de junio acumulaba 571 enfermos y 31 muertes.
Hizo hincapié en el informe presentado por autoridades de la Secretaría de Salud que reconocen que en estos momentos la capacidad hospitalaria en el hospital general, IMSS e ISSSTE y aún cuando se encuentra habilitado el centro oncológico para atender pacientes por COVID el número de personal médico, especialistas y de enfermeras es el mismo “el hecho que haya camas no quiere decir que se tenga el equipo profesional de salud suficiente para atender los casos graves de COVID-19”.
Hadad Castillo señaló que, de acuerdo con el reporte de la Secretaría de Salud, hay un tope importante en cuanto capacidad operativa de personal por el número de contagios y el alto número de funcionarios que también se han contagiado de COVID-19.
La preocupación es por el número de enfermos asintomáticos que registra un aumento considerable.
Durante la reunión del Comité de Salud los representantes del comercio organizado, empresarios, hoteles y bares y restaurantes expusieron la necesidad de reactivación económica para lo cual cumplen con medidas sanitarias, “pero hay un enorme número de comerciantes que no cumplen con las medidas sanitarias y piden tomar acciones continentes”.
El alcalde reconoció que se encuentra rebasado en su capacidad para atender esas exigencias, la autoridad bajó los brazos en cuanto a la pandemia y que es urgente la coordinación de esfuerzos para realizar acciones y reducir al máximo la movilidad en el municipio, manifestó.
La regidora enfatizó que la SESA fue clara en el sentido que esta el riesgo de llegar a un punto de no retorno y que la situación se ponga más grave que genere una crisis en el sistema de salud.
En este municipio la cosa está grave y la autoridad debe tomar acciones contundentes para garantizar la vida de los habitantes del municipio.
“Sabemos que muchos requieren de salir, pero los que no, que se queden en su casa”, señal.
Hadad Castillo expuso la incongruencia de que el mapa epidemiológico esté en un color (naranja), que no corresponde al crecimiento acelerado de los casos positivos en el municipio lo que distorsiona la realidad y es inconsistente; la falta de orden y medidas estrictas para frenar la movilidad de personas en el espacio público que no cumplen con las medidas sanitarias.
Asimismo sobre la irresponsabilidad e incongruencia que significa regresar a los casi 2 mil 500 trabajadores y trabajadoras a las oficinas del Palacio Municipal con el potencial crecimiento de las cifras por contagio. (Noticaribe)
